Cuándo nos quedamos embarazas hay veces que tenemos todo muy claro, cosas como pecho o biberón son las primeras preguntas que vamos a oír, y estamos deseando contestar… pecho! desde luego! y no es una crítica a si es lo mejor o lo peor, es una manera de realzar el pensamiento que hemos tenido algunas mamás cuando para nosotras siempre ha sido algo bonito de ver, algo que nos ha transmitido una magia especial y que estábamos deseando vivir.Cuando al fin llega nuestro momento, lo cogemos con mucha ansia, con un deseo extremo de disfrutarlo al máximo, leemos, vemos vídeos, investigamos lo que podemos en las redes… y llegamos a la conclusión; esto está dominado! será fácil! Pero bueno… a veces puede ser así, y otras muchas nos topamos con otra realidad, la de que de fácil no tiene nada…
Algo tan natural como amamantar a un hijo resulta que puede tener sus complicaciones, yo lo viví así, con muchos problemas. Me costó meses conseguir una lactancia exitosa, tuve mis días si, pero los dos primeros meses desde luego fueron muy duros.
Hoy en día, con todo superado, sé que no es tan difícil, pero cuando estás pasando por ello se hace duro y eterno… y te das cuenta que lo que más necesitas es apoyo, pero apoyo de alguien que te guíe, que te dé conocimientos, que te informe y te encamine hacia la solución del problema.
Esa persona es una asesora de lactancia, y es que no todas las mamás pasan por los mismos problemas, lo que le pasa a una no le tiene porqué pasar a otra, y aún pasando lo mismo a dos mamás la manera de responder su cuerpo tampoco es igual.
Hoy en día hay, en muchas zonas hay grupos de apoyo a la lactancia materna, ahí se reúnen madres experimentadas, que han pasado sus lactancias y vivido las de otras madres, suele haber también alguna asesora de lactancia y sobre todo hay mucha mamá primeriza con ganas de escuchar y que la escuchen. Estos grupos hacen una gran labor, además suelen ser gratuitos, pero no en todas las zonas los hay. Si te interesan, en Internet suelen aparecer siempre para que la gente pueda acceder a ellos más fácilmente.
Si en tu zona no hay grupos de apoyo a la lactancia materna, puede que haya alguna asesora de lactancia, pero lo cierto es que no suele ser así. En estos casos, si tienes alguna duda o problema siempre te quedaría la matrona, desde luego olvídate del pediatra, porque no tienen formación ninguna en lactancia materna, por no decirte que la primera opción que tendrán siempre es desgraciadamente decirte que la abandones… Tu médico de cabecera idem de lo mismo, y el problema con la única solución que puedes tener entonces; la matrona, es que te tiene que atender como una cita más, acudiendo al centro médico, donde pocas ganas tendrás de ir con un bebé, pues ya salir de casa a veces cuesta lo suyo, para cuánto más tener que estar yendo a un centro médico para que evalúen tus problemas haciendo hueco entre las citas de embarazadas.
Por eso han surgido las Asesoras de Lactancia, solemos ser madres que han pasado lactancias difíciles, y hemos recibido una formación específica sobre lactancia. Sobre nuestros problemas y sobre muchos otros para poder ayudar a evaluar y resolverlos todos.
Nuestro fin es conseguir que la lactancia materna, por quien la quiera vivir, sea no solo un alimento para su bebé, sino un disfrute y una vivencia enriquecedora.
